Aló a todos!
Centurias, siglos y otras unidades de medida indeterminadas hace que no escribía.
Dicen que cuando uno empieza a trabajar, los días se vuelven todos iguales, que cuesta diferenciar los unos de los otros y que, aunque parezca mentira a juzgar por los bostezos que me dan en la ofi, el tiempo va pasando más rápido.
Igual tienen razón y todo.
También dicen que con la edad uno se vuelve un cínico de tres pares de cojones y que en lugar de ver todo de color de rosa, lo suele ver todo color verde moho o si acaso marronoso pantano. Cosas de la vejez será, y la hipertensión.
El caso es que si uno no hiciera tonterías de vez en cuando, la vida sería un coñazo.
Señores: una visita a roma... sin ver nada de roma.
Piazza di Spagna - Sin (casi) turistas (7am)
Cementerio acatólico de Roma
Io che ne so...
Fontana a Viterbo
Viterbo la nuit
La alegría de la huerta
Creyentes a punta de pala
Carapán!
